Un nuevo banco para dar identidad a Easo
No es un submarino, ni un «mostrenco», ni una escultura de arte contemporáneo. Son los nuevos bancos-jardinera de Easo, unos elementos diseñados específicamente para … la reurbanización de esta calle que buscan dar identidad al renovado vial. El nuevo mobiliario urbano y las terrazas hosteleras que ya han empezado a colocar los bares y cafeterías han contribuido a insuflar vida a una arteria sumida en obras durante los últimos siete años. «La gente evitaba pasar por esta calle y ahora ya vuelve a venir. Ya solo falta que coloquen las plantas en las jardineras para dar ese tono verde que le falta a la zona», comentaron Jorge y Sebas desde el bar Aitana.
El calificativo de «mostrenco» le salió del alma a una pareja que hacía tiempo que no pasaba por Easo y se topó con uno de los nuevos bancos colocados junto a la calzada de carril único. «Aunque vete tú a saber, igual al final funcionan…», matizaba la mujer, que sospechaba que cuando los clientes de las terrazas no tengan sitio se sentarán en los nuevos asientos.
Los bancos han sido diseñados por Barru Arquitectura, el equipo de arquitectos al que el Ayuntamiento encargó la nueva imagen de Easo y que colabora también en el proceso de renovación de la plaza de Zaragoza. Xabier Barrutieta explica que han tratado de crear un elemento distintivo para esta calle que ayude a reforzar su nueva identidad, un espacio con un carácter mucho más peatonal. «Se trataba de diseñar un elemento ergonómico, que tuviera identidad y que ayudara a organizar la calle». Ya se han colocado 7 bancos, pero en total serán 13.
De esta forma, huyeron del modelo de alcorques y bancos industriales que se reproduce en las diferentes calles, para crear un elemento distintivo. «Los bancos-jardinera son elementos de una pieza, de hormigón de color beige, para huir del gris del asfalto y acercarnos a la arenisca de los edificios». Sus dimensiones son de 4,3 metros de largo y 1,5 metros de anchura y su peso, 3.500 kilos. Un elemento muy robusto, pero que no está fijado en el pavimento y, si es necesario, se puede desplazar para hacer alguna obra. Sus formas curvas son «una inspiración orgánica de los cascos de los barcos». Este equipo de arquitectos ha acordado con la empresa Joma para que se encargue de su producción. ‘Atseden’ será su nombre industrial.
Reposabrazos y respaldo
Al banco le falta aún un reposabrazos central y la pieza de madera del respaldo, que en realidad es «un material fenólico con un acabado en madera». Barrutieta indica que el hueco o ‘bañera’ destinado a la vegetación permitirá por sus dimensiones colocar incluso «algún arbolito» cuya función será embellecer la calle, pero sobre todo «aportar sombra» a quienes utilicen el asiento y separar el escaso tráfico que ahora pasa por el carril de la zona peatonal. Y es que los más de cinco metros de acera a cada lado de la calzada, por donde ahora solo transitan los autobuses y los taxis, han aumentando sustancialmente la sección peatonal de Easo. «La gente pasa cómoda, despreocupada, hay menos ruido y se puede disfrutar más la calle», apuntan desde el bar Aitana. Nada que ver con la situación vivida durante los siete años de obras en los que los comercios se veían encerrados por el vallado y por allí solo pasaba quien iba a comprar o consumir en algún establecimiento concreto. «Ahora tenemos que volver a recuperar a quienes venían por aquí de paso. Creo que lo lograremos porque en estas dos semanas se ha notado un cambio sustancial». Fran, del bar Gabarrón, confirma que en los últimos días «estamos trabajando mogollón».
Los seis bares de la calle han recuperado ya sus terrazas, algunos con alguna mesa más y otros con alguna menos de las que tuvieron en el periodo provisional, cuando las obras del Topo condicionaban el día a día de Easo. Aún quedan flecos, pero la reurbanización será completa a finales de septiembre. Estos días, los operarios trabajan en las aceras del último tramo impar de la calle y en la curva del hotel Londres, donde la acera crecerá hasta disponer de más de 4 metros de sección.
Los hosteleros notan ya más movimiento en la calle, aunque no se olvidan de los siete años de obras padecidos
El banco-jardinera pesa 3.500 kilos, es de una sola pieza de hormigón y su forma ha buscado la inspiración en el casco de los barcos
La plaza Xabier Zubiri seguirá la tendencia de Easo a acentuar el carácter peatonal, si cabe con más intensidad, al acoger este espacio una boca de salida de la futura estación del Topo. La nueva plaza será diáfana y solo se permitirá recuperar la fuente que había en la antigua plazoleta de la entrada del hotel Londres. Para separar la calzada de la calle Zubieta se dispondrá una alargada zona ajardinada con un banco corrido que la silueteará por su parte interior.













