Los universitarios vascos cobran de media 1.828 euros y los de la FP, 1.426
 
Los estudiantes vascos que han completado su formación en la universidad durante los tres últimos años cobran de media 1.828 euros. Así se desprende … de la última encuesta de inserción laboral, con datos del último trimestre de 2024, que analiza las trayectorias profesionales de más de 21.000 estudiantes que han obtenido una licenciatura, han completado su Formación Profesional o se han hecho con un certificado de profesionalidad. En el caso de los egresados de la FP el salario neto alcanza los 1.426 de media y para quienes han obtenido el certificado, los 1.266.
El estudio, que Lanbide acaba de trasladar este lunes, destaca el atractivo que representan para el mercado laboral quienes obtienen titulaciones técnicas universitarias. Son los que más rapidamente acceden al mercado laboral. El 94% de este colectivo estaba trabajando ya tres años después de obtener su título, con un tiempo medio de 11 meses para acceder a su primer empleo.
La radiografía de las encuestas realizadas también señala que tres de cada cuatro titulados en Formación Profesional encuentra trabajo en ocupaciones vinculadas a sus estudios. Un hecho que Lanbide atribuye al «alto grado de alineación entre esta formación y las demandas del mercado». Por su parte, seis de cada cuatro personas que obtienen un certificado de profesionalidad encuentra un empleo.
Los mejores datos de inserción laboral se producen entre los universitarios. Tres años después de conseguir su título un 85% ya se ha incorporado al mercado y, de este grupo, un 88% ha encontrado un puesto acorde a su nivel de cualificación. Los resultados del estudio van más allá y apuntan que un 78% trabaja en áreas relacionadas con su formación y que un 64% ha alcanzado la estabilidad laboral, un porcentaje que supone «el mejor dato histórico» desde que en el año 2.000 Lanbide comenzó a hacer un seguimiento exhaustivo de esta materia. Además una gran mayoría muestra un alto nivel de satisfacción, ya que tres de cada cuatro asegura que volvería a elegir los mismos estudios.
Perfiles técnicos
En todo caso, la tendencia detectada por el servicio vasco de empleo es la alta demanda que reciben en Euskadi los perfiles técnicos, científicos y sanitarios. Se trata de un atractivo creciente que «llama a reforzar la conexión entre la oferta formativa -ya sea en la universidad, la FP o los certificados- y las necesidades reales del tejido productivo», apuntan.
El estudio advierte un ligero descenso en la tasa de empleo de los titulados de Formación Profesional, que se sitúa en el 51%, aunque la calidad de empleo ha mejorado y un 62% de quienes han alcanzado un trabajo se ubican en puestos estables. Un tercio de los estudiantes consigue empleo gracias al proceso de prácticas, un hecho que «subraya su papel clave», añaden en Lanbide. También en la FP se evidencia una brecha de género, con las mayores diferencias en aspectos como la estabilidad y la jornada laboral.
En cuanto a quienes consiguen un certificado de profesionalidad, se produce un leve retroceso. El 59% ha obtenido un trabajo 18 meses después de finalizar la formación y el 30% accede al mismo gracias al título conseguido. Uno de cada cuatro lo hace a través de las prácticas obligatorias. Además, el informe remarca que valoran de forma muy positiva su formación, con una nota de 9 sobre 10.
 
			













