Las bolsas se agarran a los resultados de Nvidia para ampliar el rally que puede llevar al Ibex 35 a máximos históricos
 
Las bolsas se enfrentan a un nuevo evento que puede hacer que el rally que registran se amplíe o que toque a su fin: los resultados de Nvidia. Las cuentas del gigante tecnológico se conocerán con Wall Street y algunos de los principales índices europeos en máximos históricos. El Ibex 35 está a un paso de conseguirlo.
Nvidia presentará los resultados de su segundo trimestre fiscal de 2026 -periodo comprendido entre mayo y junio- este miércoles, una vez que termine la sesión en Wall Street.
Se espera que el fabricante de chips haya ganado unos 23.500 millones de dólares y que los ingresos hayan superado los 46.000.
De cumplir con las previsiones del consenso de analistas, Nvidia ganará un 41,4% más que en el segundo trimestre de 2024. A su vez, los ingresos se habrán incrementado un 53%.
A pesar de que los datos siguen siendo impresionantes, el crecimiento de los ingresos será inferior al registrado en el primer trimestre.
«Esto no es una mala noticia per se, ya que se esperaba desde hace tiempo que en algún momento el crecimiento se ralentizara, a medida que Nvidia copaba el mercado y el suministro llegaba a su máxima capacidad», explica Javier Cabrera, analista de mercados.
En su opinión, es «difícil» que Nvidia bata ampliamente las expectativas de los analistas, por lo que cree que «los resultados pueden tener un tinte más negativo». Para que las cuentas tengan «un impacto positivo, el nivel de sorpresa tiene que ser alto», añade.
Para Lale Akoner, analista de eToro, la clave de los resultados de la compañía fundada y presidida por Jensen Huang no son tanto las cifras ya registradas como las previsiones que sobre su negocio dé el gigante tecnológico.
El mismo experto advierte de que «con la acción cotizando cerca de máximos históricos, un buen trimestre probablemente no será suficiente«.
«La señal verdaderamente importante será si la dirección consigue reafirmar la hoja de ruta a largo plazo de Nvidia, con Rubin [su nueva arquitectura de inteligencia artificial] y la próxima generación de Blackwell como pilares centrales del ciclo de infraestructuras de IA», explica.
«Si lo logran, el argumento de inversión a largo plazo seguirá intacto», subraya.
Rumbo a los 5 billones
Si la reacción de los inversores es positiva, los resultados pueden ser un nuevo catalizador para el gigante tecnológico, cuyo valor es de casi 4,5 billones de dólares.
Por tanto, un mes y medio después de convertirse en la primera empresa en superar los 4 billones de dólares de capitalización, se encuentra a menos de un 13% de alcanzar los 5 billones.
Pero los resultados de Nvidia no son sólo un catalizador, positivo o negativo, para la propia compañía. Por su peso en los índices también son fundamentales para el comportamiento de Wall Street en el corto plazo.
Las cuentas se conocerán, además, en un momento en el que el Dow Jones, el S&P 500 y el Nasdaq Composite se encuentran en máximos históricos.
«Los resultados de Nvidia afectan a todo el sector y suelen influenciar también a otras compañías tecnológicas. Esto, sumado al peso que tiene ya en los principales índices, hace que sus resultados sean clave para que el actual sentimiento del mercado se mantenga», explica Cabrera.
Las bolsas europeas pueden contagiarse de lo que ocurra en Wall Street justo también cuando algunos de los principales índices del Viejo Continente, como el Stoxx 600 o el Dax alemán, cotizan en los niveles más elevados de su historia.
Efecto en el Ibex 35
De ser así, el rally que ha llevado al Ibex 35 a situarse a un 4,2% de sus máximos históricos podría truncarse. El selectivo nacional cerró la sesión del 8 de noviembre de 2007 en los 15.945,70 puntos. Un día después llegó a superar los 16.000 enteros, aunque terminó la jornada por debajo del nivel al que cerró la víspera.
El selectivo de la Bolsa española se encuentra ahora ligeramente por debajo de los 15.300 puntos gracias a acumular una rentabilidad anual del 31,5%.
«Para que los resultados de Nvidia afecten al Ibex, tendríamos que ver unas cifras realmente malas que causen una liquidación en Wall Street y también afecten a Europa, pero es un escenario que no contemplamos en estos resultados», subraya Cabrera.
«Es cierto que hay empresas del Ibex que ya están algo influenciadas por el sector debido sus apuestas por los centros de datos, como ACS o Solaria, pero al no ser aún su principal negocio no deberíamos ver tanto problema», añade.
 
			












