La restauración balear es la más cara de España y la que más depende del gasto extranjero

La restauración balear es la más cara de España y la que más depende del gasto extranjero



El ticket medio por consumidor de la restauración de Baleares en 2024 fue de 35 euros, el más alto de España y 14 euros por encima de la media estatal. Un dato que se complementa -y también se explica- con el hecho de que el Archipiélago sea el territorio nacional con un sector más dependiente del gasto de visitantes extranjeros.

Así lo refleja la clasificación por provincias integrada en un estudio de CaixaBank Research sobre el desempeño de la restauración el año pasado. Se trata de un informe basado en los datos de millones de transacciones de pagos con tarjetas que constata una correlación clara entre precio medio y dependencia del visitante extranjero.

«Cuanto mayor es la proporción del gasto del turista internacional en una provincia, mayor es el ticket medio», se especifica en el informe. No obstante, existen excepciones como Santa Cruz de Tenerife, Las Palmas o Alicante, donde el protagonismo del gasto extranjero es elevado, pero el ticket medio sigue siendo modesto.

No es el caso de Baleares, la provincia con la menor proporción de gasto en restauración por parte de los clientes residentes, un 39 %. El gasto del turista extranjero, por contra, es el más elevado con un 54 %. Todas las provincias registran un mayor porcentaje de gasto del cliente local que de los turistas, con las excepciones de Baleares, Santa Cruz de Tenerife y Las Palmas (aunque en el caso de estas dos últimas ello, como se ha señalado, no se refleje en una factura media especialmente elevada).

El presidente de la patronal Restauración Mallorca CAEB, Juanmi Ferrer, apuntaba esta semana la posibilidad de realizar un estudio socioeconómico para tratar de dilucidar las causas del declive en la facturación del sector en las últimas dos temporadas. En ese sentido, se refirió a cambios en los hábitos del cliente o al volumen de oferta como posibles causas. Asimismo, el propio Ferrer ya advertía que a nivel general la intención era apostar por una contención en los precios este año para contrarrestar la caída del consumo de 2024, pero no se aprecia un cambio de tendencia.

Los negocios de la oferta complementaria de Playa de Palma llevan desde el inicio de la temporada intentando reformular su estrategia para estimular el consumo y superar los números de la temporada pasada. «Somos conscientes de que Mallorca se ha convertido en una isla cara, los precios de las cartas han subido y eso afecta al bolsillo de turistas y residentes», señalaba Mika Ferrer, CEO de la asociación empresarial Palma Beach.

El incremento de los precios ha bebido de la explosión viajera postpandémica y a la sombra de las subidas hoteleras. Un informe de Delectatech apunta que Baleares, junto con Navarra y país Vasco, fue la comunidad que más subió su ticket medio en 2024 con respecto al año anterior. La restauración, sin embargo, ya no puede seguir el ritmo.

El informe de CaixaBank indica otra de las variables clave: el sector de Baleares registra la mayor estacionalidad del país, con un 61 % de su facturación concentrada en cuatro meses, de junio a septiembre. Más de 20 puntos por encima de la media española, del 40,5 %.



Fuente