La economía vasca aguanta con firmeza en medio de la incertidumbre y crece un 2,2% en el segundo trimestre
Pese al complejo escenario internacional en el que reina la incertidumbre, una de las palabras más usadas por los analistas para definir el actual entorno … económico, la economía vasca está demostrando una gran capacidad de resiliencia, ya que ha crecido un 2,2% durante el segundo trimestre del año. Así lo atestigua el avance interanual del Producto Interior Bruto (PIB) publicado este miércoles por el Instituto Nacional de Estadística (Eustat). Asimismo, la economía vasca ha pegado un significativo tirón de cinco décimas respecto al dato del primer trimestre.
En este contexto, y a falta de confirmar finalmente si los aranceles del 30% que el presidente estadounidense Donald Trump anunció para todos los productos de la Unión Europea entren en vigor el 1 de agosto, por el momento la economía vasca resiste gracias, fundamentalmente al buen comportamiento y al dinamismo del sector servicios, donde coinciden el turismo y el sector público.
El anunció del inquilino de la Casa Blanca generó preocupación en el Gobierno vasco porque «pone en jaque más de 2.000 millones de euros en las exportaciones vascas» en efectos directos. Indirectamente, Euskadi también podría verse perjudicado por una reducción de los pedidos procedentes de países tractores de la demanda, como son Alemania o Francia, que ya viven un periodo de enfriamiento económico por el debilitamiento de la demanda interna. De hecho, en estos momentos el País Vasco exporta el 30% de sus bienes a estos dos países, sus dos principales socios, con un gran peso de la automoción, una de las industrias principales de la economía vasca.
Según ha indicado el Eustat, la buena evolución del PIB vasco se debe principalmente a «la evolución del sector de servicios», pero también a la creación de empleo. Medido como puestos de trabajo equivalentes a tiempo completo, ha aumentado interanualmente un 1,4%, lo que implica la creación de más de 13.000 puestos de trabajo. En relación al trimestre precedente, el crecimiento estimado es de un 0,3%.
En este sentido, las previsiones que manejan en el Ejecutivo autonómico estiman que durante el curso del año la tasa de paro se reduzca desde el 7% registrado al final de 2024 hasta el 6,7% a finales de año, un diagnóstico que coincide con el de Confebask, la patronal vasca. Asimismo, el Gobierno vasco estimó que la economía vasca cerraría el año con un avance del PIB del 2,1%.











