“Hay que intensificar las conversaciones con EEUU, pero estar preparados para actuar”
El pulso comercial entre la Unión Europea y Estados Unidos entra en semanas decisivas. Tras el último órdago del expresidente Donald Trump, que amenaza con reactivar fuertes aranceles a productos europeos si no se revisan ciertos términos del comercio bilateral, el ministro español de Economía, Comercio y Empresa, Carlos Cuerpo, ha defendido este lunes en Bruselas la doble estrategia que lidera la Unión Europea: intensificar las negociaciones para evitar una guerra arancelaria, pero a la vez preparar un contundente paquete de contramedidas por si el acuerdo no prospera.
“Tenemos que intensificar los esfuerzos en las próximas semanas para ser capaces de llegar al escenario más beneficioso para todos, que sería un acuerdo con Estados Unidos”, declaró Cuerpo a su llegada al Consejo de Asuntos Exteriores de Comercio (CAE), que reunió a los titulares de los 27 en la capital comunitaria. Según subrayó, pese a la tensión generada tras la carta enviada por Trump a finales de la semana pasada, “todavía está ese acuerdo a nuestro alcance” y hay margen para sellarlo antes de agosto.
Sin embargo, el ministro dejó claro que la UE y España no pueden pecar de ingenuidad. “Tenemos que seguir avanzando en paralelo en la preparación de las posibles medidas de reequilibrio, que pudieran entrar en marcha si este escenario de acuerdo al final no llega a producirse”, advirtió. Bruselas trabaja así en cerrar un segundo paquete de aranceles selectivos a productos estadounidenses, que se sumarían al primer paquete cuya entrada en vigor sigue suspendida para dar espacio a la diplomacia.
Evitar la fragmentación del comercio transatlántico
La magnitud del comercio entre ambos lados del Atlántico refuerza la urgencia del diálogo. Según recordó el propio ministro español, “cada día circulan 4.600 millones de euros en bienes y servicios entre la UE y EEUU”. Para Cuerpo, fragmentar esa relación “sería el peor escenario posible para todos”, tanto por su impacto macroeconómico como por el mensaje geopolítico que enviaría al resto del mundo.
En esa línea, destacó la importancia de que los 27 mantengan una voz unida en apoyo a la Comisión Europea, que lidera las conversaciones con Washington. “Espero que hoy quede claro el respaldo unánime al enfoque constructivo de la Comisión, porque entendemos que reforzar la mayor relación comercial del mundo es lo que más conviene a ambas partes”, afirmó.
Mercosur e Indonesia, fichas clave en la diversificación
El ministro aprovechó el foro comunitario para poner en valor el giro estratégico de la UE hacia la diversificación comercial, como fórmula para ganar autonomía y mitigar riesgos. Así, celebró el preacuerdo alcanzado este fin de semana con Indonesia, que calificó de “buenas noticias” y situó junto al objetivo prioritario de “ratificar el acuerdo con Mercosur antes de final de año”.
España, recordó, ha sido uno de los grandes defensores del pacto con el bloque sudamericano, no solo por sus implicaciones económicas —las exportaciones españolas de productos agroalimentarios como el vino o el aceite podrían crecer entre un 30% y un 40%—, sino también por su valor geoestratégico en el actual contexto global. “Es una forma de mandar un mensaje claro de que Europa sigue ampliando su red de socios y que esto va a ser positivo para nuestras empresas e industrias sin ninguna duda”, afirmó.
Coordinación sin bloques cerrados
Preguntado por la posible creación de un frente común con otros grandes socios como Canadá o Japón para responder a Washington, Cuerpo matizó que la prioridad ahora es mantener el tono constructivo. “No es momento de hablar de hacer ningún frente común, sino de avanzar en las negociaciones y en el contacto con nuestros socios para profundizar nuestras relaciones comerciales con ellos, tanto hacia el oeste como hacia el este”, explicó.
No obstante, subrayó que hay “una coordinación diplomática continua” con otros miembros del G7, que comparten la preocupación por el giro proteccionista que Trump ha vuelto a colocar sobre la mesa, con vistas a su posible regreso a la Casa Blanca tras las elecciones de noviembre.
Clave nacional: financiación autonómica
En el margen del encuentro europeo, Cuerpo también fue cuestionado por la agenda interna. Hoy se reúne la Comisión Bilateral Estado-Generalidad para abordar la reforma del sistema de financiación autonómica, caducado desde hace más de una década. El ministro confió en que el encuentro permita “dar un paso importante”, y lanzó un mensaje tranquilizador a las comunidades que temen un reparto lesivo: “Se ha dicho desde la propia vicepresidencia primera del Gobierno que este acuerdo y los que vayan a venir no van a perjudicar a ninguna comunidad autónoma”.
Un verano de alta tensión comercial
De momento, la UE mantiene la suspensión de los primeros aranceles de respuesta para dar oxígeno a las conversaciones con EE UU, pero el calendario juega en contra. Bruselas se ha marcado principios de agosto como fecha tope para decidir si activa esas contramedidas. Entre tanto, España y el resto de socios intensificarán los contactos diplomáticos y cerrarán los flecos del nuevo paquete de represalias arancelarias que, en caso de fracasar la negociación, servirá para proteger a la industria europea.
“La UE tiene las herramientas necesarias para actuar si no llegamos a ese acuerdo que queremos todos”, zanjó Cuerpo, dejando claro que el bloque europeo no se dejará arrastrar sin respuesta en caso de escalada. Los mercados y las grandes compañías exportadoras seguirán con máxima atención cada paso de las próximas semanas, en un verano que promete ser clave para el futuro del comercio transatlántico.
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