El Eurogrupo advierte de una ralentización de la economía pero sin llegar a la recesión

Los ministros de Economía y Finanzas de la zona euro creen que la economía está perdiendo impulso, aunque descartan que esto se vaya a traducir en una recesión profunda para los países de los Veinte.

Lo señaló así el presidente del Eurogrupo, Paschal Donohoe, en rueda de prensa este lunes al confirmar la «pérdida de impulso en nuestra economía», aunque la «zona euro continúa siendo resiliente y no atravesará una contracción o una recesión».

El mercado laboral, que ha sido el pilar fuerte durante el último año en los Veinte, atisba cierto «enfriamiento» ha indicado el comisario de Economía, Paolo Gentiloni. Un mensaje que tiñe con cierta negatividad las perspectivas, aunque continúa siendo «robusto», según el vicepresidente económico de la Comisión Europea, Valdis Dombrovskis, que apunta a un «repunte gradual de la economía».

Gentiloni ha arrojado luz sobre la probabilidad de que la economía de la zona euro se contraiga en el tercer trimestre, dada la ralentización del crecimiento durante el último año.

«El PIB se contrajo un 0,1% en la zona del euro en el tercer trimestre, y los indicadores a corto plazo señalan que el impulso económico seguirá siendo débil en el trimestre actual», apuntó Gentiloni.

En este sentido, y con la vista puesta en la presentación de las previsiones económicas de otoño la próxima semana, Dombrovskis, ha explicado que la eurozona se encuentra actualmente en un momento de «debilidad económica». Considera que «el crecimiento aún es muy lento» y que se espera un «modesto repunte el próximo año».

El contexto geopolítico incierto a nivel global añade riesgo e incertidumbre, aclaró Gentiloni, que ha puesto sobre la mesa que si bien «hasta ahora, el impacto de las tensiones en Oriente Medio sobre los mercados de la energía se ha contenido, existe el riesgo de que suban los precios si el conflicto se recrudece».

Puso de relieve el presidente del Eurogrupo la senda descendente que dibujan el nivel de precios. Sin embargo, considera que aún hay «trabajo por hacer» porque «tenemos que bajar la inflación porque si no seremos pobres más tiempo. Es algo que no queremos que suceda».