El Dépor femenino rescata un punto ante el Espanyol (1-1)
El Deportivo vuelve a encontrarse con las tablas (1-1) en su primer partido fuera de casa. El equipo llegó al encuentro con fuerza pero de nuevo volvió a fallar el acierto de cara a portería. En el mejor momento de la escuadra deportivista el Espanyol se adelantó en el marcador. Bárbara fue el talismán que permitió al equipo sumar al menos un punto.
Fran Alonso repitió su sistema habitual de tres centrales. Raquel García, indiscutible la pasada campaña, recuperó la titularidad y portó el brazalete de capitana para liderar la defensa junto a Barth y Marina Artero, mientras Elena se quedó en el banquillo. La máxima goleadora de verano, Marisa, también salió del once inicial para dar paso a Bárbara, que demostró que merece su puesto en la línea ofensiva. El otro cambio fue la apuesta por Lucía Martínez en el medio campo.
El Dépor salió al Dani Jarque con garra para igualar la fuerza de un rival al que anticipaban duro físicamente. No dudaron en usar el cuerpo para hacerse valer en el campo, lo que le costó la amarilla a Olaya, y poco a poco se hiceron dueñas del balón. La posesión les favorecía pero no eran quien de usar esa ventaja para adelantarse en el marcador. Desde el primer minuto, el Deportivo se lanzó al ataque. Monteagudo fue la primera en avisar tras una combinación con Bárbara, aunque fue un intento sin demasiada trascendencia.
En el minuto 19, una nueva jugada de las dos futbolistas se convirtió en la ocasión más clara del partido hasta el momento. Un buen centro de Bárbara fue rematado por Paula Monteagudo, pero el balón se estrelló en el travesaño.
El Espanyol también lo intentó en varias ocasiones, pero la fortaleza defensiva de Alonso les impidió generar todo el peligro que buscaban. Barth detuvo uno de los primeros acercamientos del Espanyol por medio de Browne, en la primer ocasión de peligro de las pericas. Inês también tuvo que intervenir en alguna ocasión, aunque el peligro fue limitado en su portería. El Dépor dominaba, pero le faltaba el gol.
Ainhoa Marín también lo intentó por la banda izquierda, mostrando de nuevo su peligrosidad y ambición por crear ocasiones. Fue protagonista de otra de las oportunidades más claras, tras colaborar con Bárbara y Olaya. La delantera, que tiene pasado en el Espanyol, volvió a su tierra, Barcelona, intentó hacer magia con el balón, pero sin éxito. El Dépor estaba en su mejor momento, pero en el fútbol, sin transformar las ocasiones en goles, cualquier descuido puede costar caro.
Así fue, en la siguiente jugada el Espanyol, que durante todo el partido hizo un juego muy vertical, encontró la oportunidad adecuada por medio de Marina y Paula Monteagudo. Ona Barardad se hizo con el balón definiendo muy bien a portería sin que Inês pudiera hacer nada. El gol fue revisado, como todos desde la implantación del FVS, por un posible fuera de juego. El plano ofrecido hizo determinar a la colegiada que el gol era reglamentario, las locales se ponían por encima a pesar de que las estadísticas le jugaban en contra. El Dépor que fue superior en cuanto a juego en el primer tiempo y sin embargo se fue al descanso en inferioridad.
En el segundo tiempo el Espanyol salió más propositivo que en la primera parte, o el Dépor más desanimado, con un juego menos fluído, lo que hizo que el partido estuviera más igualado, así se reflictió también en el marcador.
Bárbara, en una acción que no parecía peligrosa en un primer momento, ganó un duelo cuerpo a cuerpo con Amaia Martínez y encontró el hueco entre Salvador y el palo, construyó la jugada más bonita del partido, que además la convirtió en la mejor jugadora del encuentro. La futbolista zaragozana anotó el primer gol de la temporada del Deportivo, ya que contra el Badalona no hubo goles.
Cuando el Espanyol parecía coger ritmo llegó el gol deportivista, para devolver las sensaciones. Tras la diana, el conjunto de Fran Alonso se animó, pero no recuperó el ritmo del primer tiempo. Bárbara fue relevada por Marisa, quien entró con ambición, probó portería en varias ocasiones, pero no logró inclinar la balanza.
El partido se igualó, mientras que las locales intentaban superar la defensa deportivista y colar balones entre la línea defensiva, obligando a Inês Pereira a intervenir en varias ocasiones. En el minuto 83, protagonizó una parada determinante en un mano a mano, y un minuto después volvió a aparecer para evitar el gol.
Así acabó el partido, el Deportivo, que tuvo la ocasión de adelantarse en varias ocasiones tuvo que ir a remolque del Espanyol y considerar el gol de Bárbara como el alivio en un partido en que las cosas no salieron del todo bien y que dejan ver que aún hay trabajo por delante en esta campaña de Liga F.














