Criteria cierra la puerta definitivamente a invertir en Celsa
CriteriaCaixa, brazo inversor de la Fundación La Caixa, ha descartado definitivamente su entrada en Celsa como socio de referencia, después de haber anunciado en abril un principio de acuerdo para controlar el 20 % de la siderúrgica.
El ‘holding’ presidido por Isidro Fainé, con Francisco Reynés como primer ejecutivo, ha decidido finalmente no ejecutar la operación, según ha anunciado Criteria en un comunicado. Dos semanas después de haber anunciado el preacuerdo, Criteria matizó que la operación se encontraba en «fase de estudio». En la nota hecha pública, el brazo inversor de La Caixa alude a razones de «encaje» entre la compra de Celsa y su propio plan estratégico.
En la misma nota, la siderúrgica catalana expresa su respeto por esta decisión.
La voluntad de no seguir adelante se conoce antes de que el próximo lunes se haga público el plan estratégico 2025-2030 de la Fundación La Caixa, primer accionista de CaixaBank, con el 31,2 % del capital.
Una vez se establezca esa hoja de ruta, se espera que Criteria adapte su propio plan estratégico, que presentó hace un año su entonces consejero delegado, Ángel Simón. De hecho, fue justamente su intención de invertir en Celsa con una cantidad cercana a los 300 millones de euros lo que precipitó el adiós de Simón.
Una inversión contracultural
Fuentes del sector han explicado a EL PERIÓDICO que la inversión en Celsa era «contracultural» para Criteria en primer lugar porque no era una ‘utility’ (compañía de servicios públicos, como el agua o la luz, donde los clientes pagan mediante el recibo) y en segundo lugar porque se trataba de un sector industrial en una empresa que no está en fase de expansión del negocio, sino de gestionar su deuda y redimensionar su tamaño. De hecho, el pasado mes de abril Celsa anunció la venta de sus filiales en Reino Unido y los países nórdicos.
Entre las razones para frenar la operación también se ha barajado la hipótesis de que se anunció de forma precipitada con la intención de contentar al gobierno español, con quien Simón mantenía una estrecha relación.
Cabe recordar que el presidente de Celsa, Rafael Villaseca, fue nombrado a finales de abril presidente de la filial española de Veolia, gigante francés de la gestión de aguas e históricamente relacionado con La Caixa.












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