El desempleo en Alemania supera los 3 millones y marca su nivel más alto en 10 años
El mercado laboral de Alemania manda señales de alerta. Y es que el desempleo ha aumentado en julio en 45.700 personas, elevando la cifra a 3,025 millones, el nivel más alto desde principios de 2015. Con todo, en base a los datos publicados por Destatis, la oficina de estadística federal, el desempleo desestacionalizado se ha reducido en 9.000 personas, manteniendo la tasa de paro sin cambios en el 6,3%.
«En Alemania, tres millones no es solo una cifra. En el contexto del mercado laboral, representa un umbral simbólico que separa la fortaleza de la debilidad. Aunque este parámetro es totalmente arbitrario, los datos actuales del mercado laboral probablemente dejarán una huella mayor en el debate público que la tendencia de los últimos años», valoran en ING Economics.
De hecho, a pesar del peso simbólico de la marca de los tres millones, el deterioro del mercado laboral alemán no es un fenómeno repentino, sino parte de una tendencia más prolongada. Es más, desde que marcó un mínimo de 2,2 millones en mayo de 2022, el número de desempleados ha aumentado de forma constante.
«Esta trayectoria refleja la economía clásica: con la economía prácticamente estancada durante más de cinco años y la industria enfrentando graves desafíos estructurales, el deterioro del mercado laboral era solo cuestión de tiempo», añaden los estrategas de ING Economics.
De cara al futuro, estos analistas consideran que las señales tentativas de que el mercado laboral esté tocando fondo han dado paso a un panorama más pesimista. «Al menos a corto plazo. Tras algunas mejoras en la primavera, los planes de contratación tanto en la industria como en el sector servicios se han mantenido estables, y el número de vacantes sigue disminuyendo».
Sin embargo, algunos indicadores, como el sentimiento de la propia agencia laboral y el índice de contratación en redes sociales, al menos apuntan a que se está tocando fondo. Al mismo tiempo, los continuos anuncios de posibles medidas de reducción de costes en la industria automotriz, y el continuo aumento del número de quiebras, sugieren que la situación podría empeorar antes de mejorar.
«Para ser claros, el impacto demográfico en el mercado laboral y la persistente escasez de mano de obra deberían evitar un empeoramiento drástico, y el mercado aún está lejos de alcanzar el hito simbólico -y en su momento alarmante- de cinco millones de desempleados, cifra que impulsó la agenda de reformas económicas de principios de la década de 2000″, valoran los expertos.
Aun así, incluso si el aumento del número de desempleados sigue siendo gradual, «el riesgo de una pérdida subyacente de la renta disponible y de una prosperidad económica más amplia es alto», concluyen en ING Economics.














